Como afecta la pornografia a tu cerebro y tu vida

 

La adicción a la pornografía: un problema creciente en la sociedad moderna

La pornografía se ha vuelto más accesible que nunca gracias a internet y los dispositivos móviles. Esto ha causado que su consumo se dispare, especialmente entre los jóvenes, lo que a su vez está generando graves consecuencias como adicción, disfunciones sexuales y una visión distorsionada de la sexualidad.

El fácil acceso a contenidos explícitos

Internet ha permitido la proliferación de páginas web con contenido pornográfico. Hoy en día, cualquier persona con un teléfono inteligente puede acceder fácilmente a millones de videos sexualmente explícitos.

Esta sobreexposición a la pornografía no tiene precedentes en la historia de la humanidad. Nunca antes se había tenido acceso ilimitado e instantáneo a tal cantidad de material pornográfico.

La adicción como problema creciente

Ver pornografía activa el sistema de recompensa del cerebro liberando dopamina, lo que puede volverla altamente adictiva. Muchas personas, especialmente hombres jóvenes, desarrollan una dependencia y compulsión por ver cada vez más material pornográfico.

Cuando el consumo de pornografía se vuelve una adicción, la persona tiene dificultades para dejar de verla a pesar de intentarlo repetidamente. La adicción hace que se necesite material más explícito y extremo para obtener el mismo nivel de excitación.

Consecuencias en la salud sexual y mental

a adicción a la pornografía tiene graves consecuencias tanto en la salud sexual como mental de las personas:

• Disfunciones sexuales: Los adictos al porno pueden desarrollar disfunción eréctil, dificultades para excitarse en un encuentro real o eyaculación precoz. Su cerebro se acostumbra a estímulos irreales que no se dan en el sexo real.
• Objetivación y cosificación: Ver pornografía en exceso hace que se cosifique y objetivice a las personas, especialmente a las mujeres, viéndolas como objetos sexuales.
• Visión distorsionada de la sexualidad: La pornografía presenta una visión irreal del sexo y las relaciones. Los jóvenes que se educan sexualmente con el porno tienen expectativas poco realistas.
• Posible paso a contenidos ilegales: El consumo progresivo de pornografía puede llevar a contenidos cada vez más extremos e incluso ilegales, como la pornografía infantil.
• Problemas de pareja: La adicción al porno dificulta mantener relaciones saludables de pareja y tener una vida sexual plena.

La recuperación es posible

Afortunadamente, el cerebro tiene plasticidad para recuperarse de la adicción si se abandona el consumo de pornografía. Los niveles de dopamina y receptores cerebrales vuelven a la normalidad después de un tiempo de abstinencia.

Es importante sustituir el porno por hábitos y actividades saludables, y buscar apoyo profesional si es necesario. Con esfuerzo y paciencia es posible reeducar la respuesta sexual y disfrutar de relaciones reales y saludables.

Datos y cifras sobre el consumo de pornografía

• El porno mueve unos $97 mil millones de dólares al año a nivel global.
• El 35% de descargas de internet son de pornografía.
• El porno tiene más visitas al día que Netflix, Amazon y Twitter juntos.
• El 70% de los hombres y un 30% de las mujeres consumen pornografía.
• La edad promedio en que los niños ven por primera vez pornografía es a los 11 años.
• Un estudio mostró que ver porno reduce el volumen de materia gris en el cerebro.
• Se estima que un 50% de sacerdotes católicos consumen regularmente pornografía.
• Alabama es el estado de EEUU que más porno consume per cápita.
• En 2020 la palabra más buscada en Pornhub fue "Hentai".
• Un meta-análisis mostró que ver porno está relacionado con actitudes machistas.
• En países donde se prohibió el porno hubo menos casos de violencia sexual.